Rolly Romero liquidó en siete a Yigit en San Antonio

El campeón mundial interino ligero de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), el estadounidense Rolando “Rolly” Romero, retuvo su corona al noquear en el séptimo round al contendor sueco Anthony Yigit, en el principal combate de respaldo de la cartelera “Charlo vs. Castaño”, que se llevó a cabo este sábado, en el AT&T Center de San Antonio, Texas. 

En la ceremonia de pesaje del viernes, “Rolly” Romero marcó 135 libras, mientras que su rival Anthony Yigit pesó 140.2, por lo que la corona iba a quedar vacante, si ganaba el sueco. Pero Romero hizo mejor las cosas, para imponerse por nocaut después de enviar tres veces a la lona a Yigit en ese séptimo asalto, sólo dos de ellas oficiales. 

Desde que sonó la campana en el primer round, Romero apareció en escena lanzando tremendos golpes de poder. Una pelea con guardias diferentes, pisotones, y Romero condujo la ofensiva. 

En el segundo, Romero siguió con su boxeo de mucha ofensiva, presionando, lanzando golpes de poder, que aún no causan el daño esperado por la movilidad de Yigit. 

En el tercero, Romero continúa con la agresividad. Hay un codazo que le provocó un corte en el pómulo izquierdo de Yigit. 

La misma tónica se produjo en el cuarto asalto, y en el quinto Romero recibió un llamado de atención del árbitro Rafael Ramos, después que mandó a la lona a Yogit con una llave de lucha. 

En este asalto, le quitan un punto a Romero por lanzar golpes cuando Ramos le indicaba separarse de un clinch. Romero mandó a la lona Yigit al final del round, con una derecha poderosa al parietal izquierdo al momento que estaba sonando la campana. 

En el sexto, Romero sale con todo en busca del nocaut. Ataca con más golpes de poder al sueco, lo presiona y combina. La pelea se inclina totalmente a Romero, quien está sometiendo a Yigit con su poderío. 

En el séptimo, Romero sigue con sus golpes de poder, buscando como noquear. Consigue una buena cantidad de golpes que someten a un desajustado Yigit, se producen tres caídas, pero sólo dos fueron válidas. Después de conectar, Romero empujó a Yigit en al menos un par de ocasiones, pero sólo en una recibió un llamado de atención. 

Esta agresividad desmedida y esos empujones, no fueron del agrado de los aficionados, que abuchearon a Romero al momento de terminar la pelea y cuando fue declarado vencedor por el réferi Rafael Ramos. 

Sin duda alguna, Romero es un buen peleador, de poder, pero no agradó a los aficionados esos empujones ilegales que bien pudieron merecer, hasta una descalificación. 

Con esta victoria, el todavía campeón ligero interino de la AMB, “Rolly” Romero, elevó su palmarés a 14-0, 12 nocauts, mientras que Yigit quedó con 24-2-1, 8 nocauts. 

"No calificaré mi desempeño, pero obtuve un nocaut feroz y lo lastimé varias veces en la pelea. Cada vez que aterrizo algo, lo lastimo”, dijo Romero. “El estilo europeo siempre es incómodo y él era un tipo más grande. Es un pescador de 140 libras. Si tuviera esos dos kilos de más, lo habría sacado de allí antes". 

"Sabía que iba a entrar fuerte y forzarlo", dijo Yigit. “Entonces, traté de controlarme al principio para ver dónde lo tenía. Era muy agresivo y sabía cómo utilizar todas sus fortalezas. Juego limpio para él". 

“Se lastimó [en el quinto] pero sonó la campana así que no tuve tiempo de rematarlo”, dijo Romero. “Si tuviera ese tiempo extra, lo habría conseguido. Estaba sosteniendo, realmente no quería participar porque estaba realmente herido. Él estaba asustado." 

"No me importaría hacerlo de nuevo", dijo Yigit. “Era un oponente duro y me gustó la pelea que estábamos teniendo. Hay una especie de respeto mutuo en el ring y lo sentí de él. Entonces, fue genial saber que subí al ring, nos respetábamos y dimos lo mejor que teníamos”. 

"Los golpes que aterrizó limpios, los vi venir", dijo Romero. Tengo que trabajar en más combinaciones. Tuve un mal campamento: al principio me lastimé los tobillos y la mano derecha. Tuve un accidente automovilístico hace una semana y media. Mi cuerpo todavía estaba adolorido por eso, pero aún así acepté la pelea.” 

“Necesito llegar a 140. Es mi categoría de peso natural. Siento que seré mucho más fuerte. Estuve en 135 durante, ¿cuánto, cuatro años? Ya es hora de que suba". 

En la pega estelar de la función, el campeón mundial superwelter de la Asociación, el Consejo y la Federación Internacional de Boxeo, el estadounidense Jermell Charlo, se mantuvo como dueño de sus cinturones, al conseguir un difícil empate contra el todavía campeón mundial superwelter de la Organización Mundial de Boxeo, el argentino Brian Castaño, en una súper pelea de Unificación Indisputable. 

En la primera pelea televisada de Showtime, Amilcar Vidal Jr. (13-0, 11 KOs) permaneció invicto, con una emocionante decisión mayoritaria de 10 asaltos, sobre un decidido Immanuwel Aleem.