¡Maromerito víctima de una descomunal sorpresa!

Una descomunal sorpresa fue que la racha invicta del mexicalense Jorge "Maromerito" Páez haya terminado a manos del dominicano Ramón Guevara, un peleador que tenía colocada la etiqueta de "nacido para perder" y que lo puso fuera de combate en cuatro episodios.

Guevara llevaba 7-11, 5 nocauts, a la hora de subir al ring de la arena Seminole Hard Rock Live de Hollywood, Florida, el viernes anterior.

Es obvio que Guevara, quien radica en la Unión Americana desde hace muchos años, es, a sus 23 abriles, un muchacho en plenitud física que se preparó como nunca, ante el solo conjuro del nombre del famoso novato.

Páez Jr. quedó con 13-1, 8 nocauts, y por lo menos ya no tendrá la presión extra de estar obligado a mantenerse imbatido.

El hijo del ex campeón mundial pluma Jorge "Maromero" Páez cumplió 19 años en noviembre pasado y lucía como "un cincho" para capturar una corona del mundo a fines de 2008, merced a la amplia experiencia internacional como aficionado adquirida durante su estancia en el Comité Olímpico Mexicano. Hoy por primera vez se plantean dudas en torno a su porvenir en los cuadriláteros.

A Jorge Páez hijo le sucedió algo parecido a lo de Francisco Bojado.

Al tapatío Bojado le hizo mucho daño la gran publicidad recibida desde que fue el pugilista más joven -y uno de los más técnicos- de todos los que compitieron en el torneo boxístico de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000. Aún cuando no ganó presea al ser víctima de un discutido fallo, era considerado como la máxima promesa para el profesionalismo entre los seis seleccionados mexicanos, incluyendo al carismático medallista Cristian Bejarano.

Es más grande quien sabe levantarse de una caída. En lo que corresponde al "Maromerito", su tropiezo parece haberse presentado muy a tiempo. A diferencia de Bojado, a quien asimismo perjudicaron al extenderle un jugoso cheque sin todavía soltar su primer puñetazo como peleador de paga, su primera humillación no obedeció a indisciplina.

Esto puede constatarlo el novato Juan Carlos "Toluco" Castillo, quien auxilió al "Maromerito" en sus sesiones de boxeo en su reciente concentración de altura, en Temoaya.

Guevara, a quien ahora anunciarán como el verdugo del muchacho Páez, había perdido cinco de sus seis últimas peleas. Su éxito viene a comprobar que no existe enemigo pequeño y a la vez también puede servir como "luz preventiva" para Julito César Chávez, quien, a diferencia del "Maromerito", ha sido objeto de una administración extraordinaria.

Ahora muchos comprenderán porqué Julito, quien no tuvo experiencia amateur, es guiado con tanto tiento.