El campeón mundial de peso pesado del CMB, Deontay Wilder, se sentó con el corresponsal de SHOWTIME Sports, Brendan Schaub, como parte de una amplia entrevista que permitió vislumbrar la mentalidad del campeón invicto, mientras se prepara para el evento de peso pesado más significativo de los EE.UU. en los últimos años.

Wilder, de 6.7 pies de estatura, se encuentra con el invicto excampeón de peso pesado Tyson Fury, de 6.9 pies, programaod para el 1 de diciembre en vivo en SHOWTIME PPV® del STAPLES Center en Los Ángeles.

Wilder, que es el único campeón de peso pesado verdadero de Estados Unidos desde 2007, habla de todo, desde su victoria definitoria sobre Luis Ortiz y su increíble poder de eliminación, hasta las presiones de ser el campeón de peso pesado del mundo y su amor por su familia en la franca candidatura. Entrevista en un autobús de dos pisos en Los Ángeles.

Sin embargo, el nativo de Tuscaloosa, Alabama, fue el que más dijo sobre su próxima batalla con Fury. "A lo largo de toda mi carrera, los muchachos siempre dijeron que solo tenía una mano", explica Wilder a Schaub, mientras se dirigen al Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, después del día de los medios de comunicación del lunes en Santa Mónica. "Pero cuando te subas al ring, va a ser diferente. El plan de juego va a salir por la ventana, como dijo Mike Tyson".

"Este es el momento oportuno para que Estados Unidos se despierte y comprenda que tienen al hombre más malo del planeta aquí", continúa apasionadamente Wilder. "¿Y crees que voy a dejar que este gitano venga aquí y arruine todos esos planes para mí? No lo creo".

El enfrentamiento de peso pesado encabeza el 1 de diciembre PPV SHOWTIME en vivo desde el STAPLES Center en Los Ángeles (9 p.m. ET / 6 p.m. PT). Wilder, quien ha eliminado a los siete retadores de su título, intentará hacer su octava defensa de peso pesado del CMB. En la tercera pelea de su regreso, Fury tiene la oportunidad de convertirse en dos veces campeón mundial de peso pesado.