La Junta de Control de Boxeo Británico y Antidopaje del Reino Unido mantiene investigaciones sobre los resultados de drogas de Connor Benn después que en octubre pasado diera positivo a la sustancia prohibida de clomifeno, antes de su pelea programada con Chris Eubank Jr.

Benn ya trata de mirar hacia el futuro y expresó que en su regreso le gustaría una pelea contra Keith Thurman, y posteriormente tiene como objetivo a Errol Spence Jr. campeón de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y la Federación Internacional de Boxeo (FIB).

En un mundo ideal, Benn dijo que primero le gustaría pelear contra el ex campeón Keith Thurman, seguido de un enfrentamiento con el campeón de la AMB, el CMB y la FIB Errol Spence Jr.

“Thurman, luego Spence”, dijo Benn en respuesta a una pregunta de un fan en su historia de Instagram.

Sobre Thurman señaló “cualquier día de la semana”, recordando que Benn ha reiterado en varias ocasiones su deseo de medirse a Thurman. Asimismo, indicó que pretende subirse al ring dos veces en 2023.

Sin embargo, se desconoce la forma en la que Benn pueda enfrentarse a cualquiera de los boxeadores antes mencionados, dado que los pesos welter norteamericano están bajo la promoción de Premier Boxing Champions, dirigida por Al Haymon, un rival de Eddie Hearn y su promotora Matchroom Boxing.

Pese a la situación por la que atraviesa Benn, tanto él como su promotor Hearn, ha insistido en su deseo de un choque en los próximos meses. El británico no tiene derechos para pelear en su tierra natal, pero ha dejado clara su intención de trasladarse a suelo extranjero, siendo una opción Estados Unidos o el Medio Oriente.

Pero, las comisiones estatales en California, Nevada y Texas han dejado en claro que no otorgarán licencia a Benn para pelear en sus estados mientras su investigación con la junta británica esté en curso.