Ismail Madrimov despertó el interés de todos al obtener una convincente victoria ante Magomed Kurbanov con una victoria por nocaut después del quinto asalto, para quedarse con el título vacante de peso súper welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).

"Es una gran sensación, esperé mucho por este momento. Quería este título, ahora estoy aquí y este cinturón es mío y vengo a Uzbekistán", expresó Madrimov, que ahora tiene como su objetivo, la unificación. 

"Es mi primer título y necesito cuatro cinturones", destacó.

El ritmo de la pelea fue constante, ninguno logró encender el papel de toque, pero Madrimov estableció cierta supremacía.

Kurbanov, con su izquierda baja, lanzó jabs mientras Madrimov intentaba cronometrarle con golpes fuertes ocasionales, y encontró un espacio para un gancho de izquierda en el segundo.

El perdedor parecía más unidimensional y de un solo ritmo, mientras que el uzbeko entraba y salía, arriba y abajo, manejaba la distancia, elegía sus lugares y no desperdició la mayoría de sus oportunidades.

En el quinto, Madrimov lanzó un largo derechazo que aterrizó en la cara del ruso, logró continuar, pero siguió acechando pacientemente, trabajando y acertando tiros seleccionados, y a medida que avanzaba el round, Madrimov empezó a acelerar el ritmo.

Cuando Madrimov arremetió contra el árbitro, Steve Gray, este consideró que había visto suficiente. Gray abrazó a Kurbanov contra las cuerdas; el uzbeko giró y celebró con una voltereta hasta completar el remate.

“Es un animal, es el nuevo Genneady Golovkin, atravesó a Kurbanov con facilidad. Recuerden el nombre, el poder uzbeko, Ismail “The Dream” Madrimov viene por todos los cinturones en la división de 154 libras”, expresó con emoción Eddie Hearn, dueño de Matchroom Boxing Promotions, que copromueve a Madrimov,

Kurbanov tiene ahora marca de 25-1 (13 KOs).