El uzbeko, Hasanboy Dusmatov, derrotó, por decisión unánime en diez asaltos, al contendor español, Samuel Carmona, para coronarse campeón mundial mosca de la IBA, en la estelar de la Noche de Campeones de la IBA, realizado este domingo, en la Arena Humo, de Tashkent, Uzbekistán.

El legendario locutor del Salón de la Fama, Michael Buffer, presentó los dos eventos principales de la noche, aumentando la emoción en la arena. 

Dusmatov y Carmona libraron una emocionante pelea de 10 asaltos llena de intensos intercambios que mantuvieron a la audiencia de pie, aplaudiendo vigorosamente cada combinación exitosa de su héroe local. Al final de la pelea, los tres jueces habían marcado a favor de Dusmatov: 99:91, 100:90 y 97:93. El presidente de la IBA, Umar Kremlev, entregó a Dusmatov, el cinturón del campeonato. 

En el evento coestelar, el boxeador ruso Artem Suslenkov dominó cada asalto contra Michael Hunter de Estados Unidos. En este choque de pesos súper pesados, Suslenkov presionó agresivamente, mientras Hunter intentaba contraatacar. Suslenkov anticipó y contrarrestó con éxito las estrategias de Hunter, utilizando eficazmente golpes al cuerpo para conseguir una victoria en 8 asaltos. 

La cartelera incluyó seis peleas, en cada una de las cuales los boxeadores uzbekos ganaron. 

La estrella en ascenso Jakhongir Zokirov de Uzbekistán, campeón mundial juvenil, se enfrentó al boxeador croata Agron Smakici, que ostentaba un récord profesional de 20-2. Ambos boxeadores comenzaron la pelea con cautela, y aunque es difícil esperar un alto ritmo de los pesos súper pesados, era evidente que el joven uzbeko no quería apresurarse y estaba estudiando a su oponente. 

La amonestación estaba justificada, ya que el croata es un boxeador experimentado y sirve como sparring de algunas de las principales estrellas del mundo. Ambos peleadores pusieron a prueba sus barbillas con golpes sólidos, pero Zokirov a menudo era más preciso. Él marcó el ritmo de la pelea, usando su ventaja de tamaño para preferir pelear desde una distancia más larga. A pesar de la disparidad de edad y experiencia, Zokirov lideró con confianza durante todo el combate, asegurando una victoria unánime por un amplio margen. 

Asadkhuja Muydinkhujaev, campeón mundial IBA defensor de Uzbekistán, participó en su primera competencia de 8 asaltos contra Fatih Keles de Türkiye en 67 kg. El uzbeko superó a su oponente en velocidad y movimiento. Keles confió en acortar la distancia en una postura cerrada y lanzar ganchos durante los ataques del uzbeko.

Sin embargo, Muydinkhujaev se adaptó rápidamente a esta táctica, actuando de manera preventiva, rompiendo hábilmente la distancia después de sus propios ataques y frecuentemente lanzando golpes que penetraron el bloqueo de su oponente. La actuación de Muydinkhujaev no dejó lugar a que Keles pudiera desafiar, lo que resultó en otra victoria unánime y segura. 

En un explosivo primer partido de 6 asaltos en la división de 75 kg, el uzbeko Alokhon Abdullaev conectó consistentemente poderosos golpes contra Otgonjargal Jargal de Mongolia. El juego de pies superior de Abdullaev le permitió esquivar ataques y contraatacar de manera efectiva, culminando en una sorprendente combinación de uno-dos que derribó a Jargal en el quinto asalto, lo que lo llevó a una victoria por nocaut. 

El medallista de plata del Campeonato Mundial IBA 2017, Ikboljon Kholdorov, se enfrentó a Sagadat Rakhmankul de Kazajstán con 71 kg. A pesar de ser empujado a las esquinas del ring, la agilidad y la presión de Kholdorov en el quinto asalto le valieron una decisión unánime. 

En la categoría de 63,5 kg, el uzbeko Mujibullo Tursunov compitió contra el tanzano Juma Chocki Ramadhani. Tursunov controló la pelea y logró desestabilizar a Chocki al final del primer asalto. Su implacable presión y dominio de la distancia culminaron en una victoria celebrada con entusiasmo por el público. 

Por último, Elnur Abduraimov de Uzbekistán se enfrentó a Carlos Ornelas de México en la división de 60 kg en una pelea muy reñida. A pesar de recibir un fuerte centro de Ornelas, Abduraimov perseveró, lanzando golpes precisos que llevaron a una decisión unánime a su favor, para el deleite de la multitud.