Oleksandr Gvozdyk, ex campeón mundial de peso semipesado que se medirá a David Benavidez, recién llegado a la división, por un título interino obligatorio del Conseko Mundial de Boxeo (CMB) pese a que no existe ningún anuncio formal.

"Ni se ha anunciado todavía porque todo el mundo ya lo sabe gracias a fuentes internas. No sé qué hacen, quizás quieran anunciar otra pelea antes, por lo que he visto PBC realmente no ha anunciado ninguno de los programas, pero no lo sé. Me dijeron una fecha que les dije antes, el 21 de junio, que está en mi contrato, pero la pelea se mudó a Houston. Todo es legítimo, la pelea ahora será en Houston el 22 de junio”, expresó Gvozdyk, en una entrevista exclusiva con BoxingScene.

El peleador ucraniano ha escuchado a su próximo rival, aun sin anunciar, envolverse con todo lo relacionado con la superestrella mexicana del boxeo, Saúl “Canelo” Álvarez, pero aseguró que es un tema sin importancia.

“No me importa, realmente afecta cualquier cosa, no afecta el estado de la pelea, ni a mi oponente, ni mi bolsa. Puede que afecte mi ego, pero me siento bien con ello, así que no me importa en absoluto, sólo ponme en fila para una pelea por el título, es lo único que necesito. Toda la televisión y YouTube, que se transmiten en todas partes, no me importa. Mientras tenga mis peleas”, remarcó.

Benavidez debutará en las 175 libras frente al ucraniano, llegará a este encuentro con victorias sobre Caleb Plant y Demetrius Andrade en 2023 y se sitúa como el oponente favorito de los medios para Canelo después de Jaime Munguía el 4 de mayo.

“Benavidez es un gran peleador, pero su próxima pelea será conmigo, no contra Canelo. Si yo fuera él, me concentraría en mi próxima pelea, no en Canel. Si me están cuidando entonces, no es lo que espero, pero si es así, lo agradezco. Si me están mirando, entonces perfecto, será más fácil, dicen que es un monstruo y necesita más oportunidades de sobrevivir”, resaltó el peleador ucraniano.

Benavidez apareció recientemente borracho mientras era entrevistado en vivo por televisión, haciendo que comenzara a cuestionarse su compromiso, sin embargo, posteriormente se disculpó por lo sucedido.

"Esperaré su mejor versión. Sí, lo vimos borracho en la televisión, pero estamos a más de dos meses de la pelea, probablemente no ha comenzado su campamento todavía. Si tiene tiempo para divertirse y relajarse, ¿por qué no? A veces la gente bebe, no está prohibido. Depende de él, pero a lo mejor sus fans no quieran verlo así, pero eso a mí no me importa. Si sigue bebiendo y sin entrenar, entonces es más fácil para mí”, sostuvo. 

“Recientemente estuve con Gilberto Ramírez ayudándolo en su pelea por el título mundial y lució impecable. Mantengo la misma rutina, pero los niveles aumentaron un poco para estas grandes peleas en los entrenamientos. Es un gran paso adelante respecto a mi última pelea, pero ya me he enfrentado a este tipo de calidad antes”, concluyó.