El peleador británico Tyson Fury fue sacado de un pub en Morecambe (Gran Bretaña) con "unas copas de más", en el que los guardias de seguridad del local nocturno lo acompañaron a la salida abrazado debido a su estado de ebriedad.

A la salida del local, Fury colapsó y cayó al suelo de rodillas y, de acuerdo con el diario “The Sun”, el peso pesado salió de tragos con unos amigos y los responsables del local le pidieron al boxeador que lo abandonase al considerar que estaba ebrio, tras lo cual se puso a hacer y proferir despropósitos.

En la grabación, que se propagó velozmente en redes sociales, se observa a Fury con dificultad para caminar, casi tambaleando, dentro del lugar mientras es escoltado por dos empleados del lugar para dirigirlo a la salida y al estar en la calle, se ve arrodillado antes de darse la cabeza contra un poste de luz.

Tyson Fury semanas atrás dejó abandonada su condición de invicto luego de ser derrotado contra Oleksandr Usyk en su pelea por el título mundial indiscutible de peso pesado, para que el ucraniano se proclamara campeón indiscutible.

“Bebió un par de más y tampoco se sentía muy bien”, comentó una fuente anónima cercana al peleador británico, que según él había pasado más de un año sin consumir alcohol.