Conner Kelsall reclamó el título peso mosca de la Commonwealth al vencer por decisión mayoritaria a Conor Quinn para reclamar en 12 asaltos, en un duelo de invictos celebrado el pasado viernes en The SSE Arena, Belfast, Irlanda del Norte.

Kelsall (12-0, 1 nocaut) recibió la decisión en las tarjetas 116-112, 115-114, mientras que el otro juez no pudo separar a los dos anotando el encuentro 114-114, en un evento promovido por Queensberry Promotions.

Tuvieron un comienzo cauteloso, Quinn se acercó al cuerpo para intentar frenar el movimiento perpetuo de Kelsall y, aunque sus costillas estaban enrojecidas desde el principio, no fue un factor determinante.

Pese los intentos, Quinn no pudo cambiar el ritmo y pasó gran parte de la pelea siguiendo a Kelsall y no pudo cortar las esquinas de manera efectiva, mientras su oponente boxeaba en puntillas usando su jab y en ocasiones su mano derecha incluso cuando Quinn fue exitoso, Kelsall fue fue veloz.

En los últimos 20 segundos de la pelea, Kelsall corrió alrededor del ring haciendo que Quinn levantara las manos en el aire para indicar que creía que había ganado, aunque una negativa forma de terminar la pelea, pero aunque las tarjetas de puntuación estaban un poco más ajustadas de lo que parecía, consiguió la victoria.

"Dijo que me iba a atrapar, no creo que me golpearan apenas, llámelo empate, yo lo llamo falta de coincidencia. Mira mi cara comparada con la suya, creo que eso dice más que mil palabras”, sostuvo Kelsall.

En la pelea co-estelar, Pierce O'Leary dominó a su compatriota dublinés Darragh Foley durante 10 asaltos para lograr una amplia decisión unánime.