Fabio Wardley noqueó a Justis Huni en el décimo asalto en el Reino Unido

El británico Fabio Wardley noqueó a Justis Huni en el décimo asalto de una pelea de peso pesado, como el choque estelar de una cartelera que se celebró este sábado desde el Portman Road, Ipswich.

Huni llegó a la pelea como reemplazo de último momento de Jarrell Miller, quien se retiró del combate debido a una lesión en el hombro durante el campo de entrenamiento, quien dio la talla y un gran espectáculo antes de se noqueado.

Wardley iba perdiendo en las tarjetas de los jueces con una gran cantidad de puntos, pero detuvo a Huni con un golpe perfecto. Huni había logrado dominar a Wardley durante los 9 asaltos anteriores.

Wardley parecía estar perdido y en mal estado durante el resto de la pelea, por el castigo que Huni le había infligido durante 10 asaltos, pero conectó un golpe decisivo cuando más lo necesitaba.

El australiano superó a Wardley, pero se desvió para conectar un golpe contundente que Wardley supo aprovechar para responder con un derechazo potente que puso punto final al encuentro, a los 102 segundos del décimo asalto.

Round por round

Desde el primer momento Huni fue rápido y efectivo con sus manos, conectó 2 golpes al cuerpo, seguidos de un derechazo por encima de la cabeza que tomó a Wardley con la guardia baja. Wardley conectó al cuerpo desde el segundo asalto, pero Huni respondió con un gancho de izquierda a la cabeza.

En el tercer asalto, Wardley pareció lastimar a su oponente quien tambaleó sobre sus puertas, pero puco contraatacar. Salió con todo en el cuarto asalto, acorralando a Wardley y atacándolo con fuerza, aunque este trató de defenderse, sin éxito.

En el quito episodio, Huni pareció lastimar a Wardley conectando al cuerpo en varias ocasiones, llegó un zurdazo del australiano que hizo a Wardley encogerse del dolor. Al llegar el sexto round, Wardley lanzó un jab, sin mayo ofensiva, Huni aprovechó para conectar un derechazo que envió a Wardley contra las cuerdas.

Huni salió atacando nuevamente en el séptimo, con un golpe que dejó en peores condiciones a Wardley, seguido de un derechazo sobre la izquierda baja de Warldey para enviarlo nuevamente contra las cuerdas.

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El ritmo se mantuvo en el octavo asalto a favor de Huni, volviendo a golpear al cuerpo de Wardley quien se mostraba cada vez más golpeado. Para el noveno round, el rostro del británico estaba ensangrentado y sus golpes ya no eran potentes.

Al inicio del séptimo asalto, Wardley pudo salir al sonar la campanada inicial, Huni llegó con fuerza para aterrizar en la integridad de su rival, pero este lanzó un derechazo que impactó en la barbilla de Huni, quien se desplomó, intentó levantarse, pero fue en vano.

El árbitro John Lathem contó 10 antes de que pudiera ponerse de pie. La detención se confirmó a los 102 segundos del décimo asalto. Con este resultado Wardley mejoró su récord a 19-0-1, con su 18ª victoria por nocaut.

"No pretendo ser como [Oleksandr] Usyk con esas habilidades; lo que sí sé es ganar peleas. A veces hay que encontrar la manera de ganar. Lo saqué a relucir", indicó Wardley posterior a la pelea.