En un resultado sorpresivo, la vietnamita Thi Thu Nhi Nguyen derrotó por decisión unánime a la ahora excampeona Etsuko Tada, de Japón, para conquistar el título mínimo de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), en uno de los principales choques de una cartelera que se llevó a cabo este sábado en el Gimnasio Wadong de Ansan, en Corea del Sur.

En vista de su mayor experiencia en este deporte, Tada era amplia favorita para imponerse en este combate, pero Nguyen hizo un mejor trabajo, consiguió una buena ventaja en los primeros asaltos, para imponerse por la vía de los puntos, con un idéntico 96-94 en las tres tarjetas de los laterales.

Con este resultado, el título cambia de dueña, y Nguyen mejoró su record a 5-0, con 1 nocaut, mientras que Tada, de 40 años, quedó con palmarés de 20-4-3, con 7 nocauts.

En el pesaje del viernes, ambas peleadoras participaron en su pesaje para la pelea, y alcanzaron el límite de peso de 105 libras, de hecho ambas lo hicieron con facilidad, llegando a alrededor de 104.3 libras.

En esta misma velada, el uzbeko Olimjon Nazarov (26-5, 14 nocauts) retuvo su título mosca Oriental, avalado por la Organización Mundial de Boxeo (OMB), al derrotar por puntos al filipino Michael Mendoza (11-2-2, 4 nocauts). Nazarov ganó por decisión 115-113 en las tres tarjetas de los jueces.

Por su parte, el ex retador al título mundial ArAr Andales (12-2, 5 nocauts) logró una victoria por nocaut técnico sobre Minh Phat Sam de Vietnam (7-4, 5 nocauts), por el título de peso mínimo oriental de la OMB.

Desde el principio, estaba claro que Sam era el peleador naturalmente más grande, lamentablemente para él esa era la única ventaja que tenía, ya que Andales era rápido, más astuto y más hábil técnicamente. En el round 3, la cara de Sam se estaba hinchando, y ambos ojos se cerraban rápidamente y en el cuarto la hinchazón empeoró y parecía que una parada era inevitable, pero Sam trató de destriparlo y pelear.

A medida que avanzaban los rounds, la cara de Sam se hinchaba cada vez más, mientras que Andales se veía muy cómodo, usando la cara de Sam como práctica de tiro. En el séptimo, la hinchazón fue lo suficientemente mala como para que el árbitro llevara a Same al médico del ring, quien le indicó que terminara la pelea, salvando a Sam de un mayor castigo. La decisión correcta del médico, y una que vio a Andales coronarse como el nuevo campeón.