Conor Benn no es reconocido como el peleador más fuerte de todos, tampoco como un pegador extremadamente duro. Sin embargo, con el paso del tiempo comenzó a llenar su cuerpo y a desarrollar poder.

Vencer a sus oponentes reivindicó sus actuaciones anteriores y se enfocó en nombrar a todos los mejores en la división de peso welter del mundo, pero también le permitió mencionar a Chris Eubank Jr., uno de los más altos clasificados.

Pese a que compiten con 13 libras de diferencia, pelear contra Eubank en un encuentro con sentido, teniendo en cuenta que sus padres pelearon hace más de tres décadas.

El encuentro se había programado para el año pasado, sin embargo, no pudo efectuarse cuando Benn, días antes de su choque diera positivo a una prueba de drogas, lo que ocasionó que pasara este año intentando limpiar su nombre.

Todo no ha salido como Benn esperaba, pero recientemente se le permitió pelear, principalmente un choque de preparación, donde anotó una decisión desigual ante el veterano Rodolfo Orozco.

Eso era lo único que el boxeador británico necesitaba para volver al cuadrilátero y sentirse en confianza. Ahora Eddie Hearn, dueño de Matchroom Boxing Promotions, indicó que han aclarado todos los puntos y ha vuelto a acordarse un choque entre ambos.

El promotor esperaba afinar las cosas para finales de diciembre, pero ese pensamiento finalmente ha quedado en el camino, ya que principios de 2024 es ahora un objetivo más real para el encuentro entre Benn y Eubank Jr.

Benn mantiene su confianza en sí mismo. Aún no está claro si subirá completamente a 160 o si establecerán un peso fijo.  Sin embargo, al británico no le importa la categoría de peso, Benn cree que el resultado final será el mismo.

“Voy a arrancarte la cabeza del maldito cuello en 3 rounds”, dijo Benn en su cuenta de redes sociales.