Oscar De La Hoya, dueño de Golden Boy Promotions, está convencido que Ryan García se ha "metido en la cabeza" de Devin Haney y que, en consecuencia, Haney se arriesga a abandonar su plan de juego. 

Haney, campeón superligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), empujó a su rival de toda la vida cuando se tuvieron su cara a cara el pasado martes desde el Empire State Building, a tan solo cinco días de defender por primera vez su título en el Barclays Center de Brooklyn, Nueva York.

La rivalidad data de sus días como aficionados, cuando se midieron seis veces y ganaron tres veces cada uno, con el paso del tiempo se ha vuelto más personal, hasta el punto de que su confrontación del martes se produjo con el padre, entrenador y manager de Devin, Bill, amenazando de muerte a su rival.

De La Hoya observa la pelea del sábado, se retiró como profesional después estar en medio de intensas rivalidades con Fernando Vargas, Ricardo Mayorga y Floyd Mayweather, todas las cuales lo involucraron peleando con cierto grado de emoción. Fue su rivalidad con Vargas, a quien detuvo en 2004, lo que más le recuerda Haney-García, pero son las comparaciones entre Mayweather y García las que consideró más acertadas.

"Será una pelea intensa, ninguno de los dos se soporta, así que si llevan esa energía dentro del ring será una pelea increíble y tendrá un ritmo rápido. García está justo donde quiere está listo y está en lo cierto”, expresó el promotor.

“Me da confianza que se haya metido en la piel de Haney, nunca vi a Devin así, lo empujó, está nervioso. Él dice: Ryan en realidad me recuerda la forma en que Floyd solía meterse en tu cabeza, ¿sabes? Y sacarte de tu plan de juego y creo que Ryan lo logró”, continuó.

“Nunca vi a Haney así, empujándolo. Es como si le quitara el foco y ahora quiere noquearlo y entrar allí, y bueno, vámonos, esa es una buena señal. Cuando estás en el ring y te molestan, tu plan de juego se va por la ventana, siempre pasa”, precisó.

"Se le metió en la cabeza y, cuando llega la noche de la pelea, debes mantener la compostura, y ahí es dónde veremos qué sucede”, sostuvo De La Hoya.

Las preocupaciones sobre la salud mental de García se acrecentaron desde que iniciaron los intentos de promover la pelea del sábado. Una preocupación adicional existía a partir de la aparición de García en Manhattan el martes, cuando parecía considerablemente más grande que un peleador que se preparaba para pesar 140 libras.

“No hay preocupación alguna, él dará peso. Ha estado completamente enfocado. Grave lo que hace en las redes sociales tarda 10 segundos en aparecer. Está trabajando duro y lo ha hecho durante los últimos dos meses”, concluyó el promotor.