Yokasta “Yoka” Valle defendió sus títulos de campeona mundial unificada de peso mínimo de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) y la Organización Mundial de Boxeo (OMB), ante Anabel Ortiz con una decisión unánime en 10 asaltos.

Los resultados de los jueces 100-90, 99-92, 99-91 quedaron a favor de la boricua en su pelea celebrada en el Polideportivo de Cartago en Costa Rica, bajo transmisión de DAZN.

La peleadora tica hizo uso de su conjunto de habilidades para sobreponerse a la arremetida de Ortiz, excampeona de peso paja de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), quien aplicó presión ante la puertorriqueña, pero no siempre obtuvo el resultado esperado.

Valle uso su jab creando combinaciones efectivas a corta distancia, pero la mexicana no dudó en soltar las manos, aunque en la mayoría de los casos no fue efectiva.

La boxeadora local encontró en diferentes ocasiones la forma de facilitarse las cosas, pero no siempre empleó sus habilidades acostumbradas, por el contrario, se inclinó a pelear cuerpo a cuerpo, para que su oponente respondiera con un enfrentamiento interno, dejando como consecuencia un moretón en el ojo derecho de Valle.

Para el séptimo episodio, Valle soltó sus manos, pero su contrincante pudo atar internamente a la vez que peleó en algunos momentos sabiendo que para ganar en ese momento debía anotar un nocaut ante la campeona unificada.

Ortiz se fue por arriba en el octavo episodio, pero no logró encontrar su objetivo dado que Valle se defendió de todos los ataques y mandó a la mexicana a la lona, aunque ese momento se consideró un desliz dado que Valle empujó hacia abajo en la parte posterior de su cabeza después de conectar un gancho de izquierda.

La visitante presentó un corte en la nariz y la sangre goteaba al comienzo del penúltimo round, aunque ambas soltaron sus golpes, fue Valle quien se mostró superior en la mayoría de los intercambios.

Para finalizar, Valle continuó mostrando sus mejores habilidades y su artillería pesada, pero su rival, aunque ya no tenía forma de ganar el encuentro, peleó con valentía pese a que lidiaba con la sangre y su ojo izquierdo cerrado.